Un intercambiador de calor y humedad (HME) ayuda a reducir la producción de mucosidad y la tos humidificando y filtrando el aire que respira a través del estoma.
El HME se coloca directamente sobre el estoma y, a medida que se exhala el aire, el calor y la humedad de la respiración se capturan en el HME. El calor y la humedad se añaden al aire inhalado antes de que pase a los pulmones. Los HME añaden una ligera resistencia a la respiración para ayudar al buen funcionamiento de los pulmones.
Los HME también ayudan a mantener las partículas grandes fuera de los pulmones, como insectos o migas de comida. Es importante utilizar un HME las 24 horas del día, los 7 días de la semana. La mayoría de las personas que utilizan sistemáticamente un HME las 24 horas del día, los 7 días de la semana, experimentan menos problemas de tos y producción de mucosidad.
Vea este vídeo sobre lo que ocurre en el interior de sus pulmones cuando utiliza un HME y cuando no lo utiliza.
Un HME contiene una espuma tratada con un compuesto especial llamado cloruro cálcico. Esto atrapa el calor y la humedad del aire que respiras.
En otras palabras, un HME "acondiciona" el aire que respiras manteniéndolo a la temperatura y humedad adecuadas. Esto contribuye al buen funcionamiento de los pulmones. No lave ni enjuague nunca su HME, ya que lo dejará ineficaz.
Lleve su HME todo el tiempo para obtener los mejores beneficios. Si no ha utilizado antes un HME, es posible que sus pulmones empiecen a producir más mucosidad. Esto es completamente normal y se calmará en un par de semanas, una vez que tus pulmones se hayan adaptado al nuevo filtro del HME.
Si sientes que vas a toser, quítate el HME y cúbrete el estoma con un pañuelo sin pelusa. A veces, no hay tiempo suficiente para quitarse el HME antes de toser. Es posible que tengas que cambiar tu HME si te entra mucosidad.
Si utilizas una prótesis de voz, sólo tienes que pulsar la tapa del HME para hablar. El dispositivo te ayuda a respirar con más facilidad, lo que es importante cuando haces pausas entre frases largas.
Muchas personas descubren que llevar un HME todo el tiempo puede ayudarles a llevar una vida mejor y a volver a hacer muchas de las cosas que hacían antes de la operación. Esto se debe a que un HME les ayuda a producir menos mucosidad, toser menos, sentir menos irritación en la tráquea y respirar con más facilidad.
Existen diferentes tipos de HME especialmente diseñados para funcionar mejor en diferentes situaciones.
Uso de un HME durante el día
El HME doméstico está diseñado para mejorar su salud pulmonar cuando se toma las cosas con calma. Este HME proporciona una alta humidificación con una respiración cómoda durante todo el día.
El HME facilita la respiración cuando está fuera de casa o realizando sus actividades diarias. Este HME tiene un perfil bajo y una forma redondeada y suave, para un aspecto más discreto al salir.
Uso de un HME durante la noche
Ahora llegamos a uno de los momentos más importantes del día: irse a dormir. Una buena noche de sueño le ayudará a tener un mejor día. Por eso, antes de irse a la cama, cambiar el HME, le ayudará a reducir la tos para disfrutar de noches más confortables.
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